La comodidad determina que nuestra experiencia sea tan agradable que queramos volver a repetirla o que la pasemos tan mal que no queramos intentarlo nuevamente. Aquí el equipamiento que llevemos y la forma de utilizarlo tienen un papel determinante. En el blog de esta semana queremos hablar sobre uno de los equipamientos principales que llevamos a todos nuestros viajes: la vestimenta. Por ende, explicaremos una teoría muy conocida en el mundo outdoor: la teoría de las 3 capas.

LA TEORÍA DE LAS 3 CAPAS

Esta teoría consiste en la combinación de prendas para crear un microclima que proteja nuestro cuerpo, tanto de nuestro propio sudor como de las condiciones climatológicas. Además, nos permitirá regular nuestra temperatura corporal.

Cabe resaltar que esta teoría es una guía básica para entender la lógica al momento de vestirnos. Según nuestras necesidades, el uso de estas capas y sus combinaciones varía de acuerdo a las condiciones climáticas y a las actividades que realicemos. Con la experiencia, cada uno aprenderá a crear las combinaciones adecuadas a sus exigencias y preferencias.

EL SUDOR: NUESTRO PEOR ENEMIGO

Cuando realizamos cualquier actividad física, nuestro cuerpo aumenta su temperatura y la manera de “refrescarnos” es a través de la evaporación de agua por nuestra piel. Es decir, el sudor. 

Si al momento de sudar no contamos con las prendas adecuadas, estas se mojarán y ocasionarán que perdamos calor corporal. Estos cambios de temperatura pueden causarnos sensación de malestar y un resfrío. Pero, en el peor de los casos, pueden incluso acabar en hipotermia. Por esta razón, el objetivo de la teoría de las tres capas es mantener nuestro cuerpo seco y abrigado.

Imagen de Tatoo

CADA UNA DE LAS CAPAS

PRIMERA CAPA: SEGUNDA PIEL

Esta capa es la que estará en contacto directo con nuestra piel durante toda la actividad. Por ende, su función principal es evitar la sensación de humedad provocada por el sudor y, consecuentemente, el enfriamiento de nuestro cuerpo. Se recomienda que estas prendas sean lo más ceñidas al cuerpo, para evitar la entrada del viento, sin perder la comodidad para movernos con facilidad.

Se utilizarán materiales no absorbentes y transpirables compuestos principalmente por fibras sintéticas (poliéster, polipropileno, elastane, etc) o lanas tecnológicas como la lana merino. Esta última es muy valorada porque no retiene los olores. Es importante que en esta capa evitemos el uso de fibras naturales como el algodón puesto que se empapan con facilidad y demoran en secarse.

Como tip adicional, te recomendamos que estas prendas tengan un cuello alto para mayor protección contra el frío y un cierre en el cuello para facilitar la ventilación. El cierre es vital para un enfriamiento rápido en casos donde nuestro cuerpo retenga mucho calor. 

Algunos ejemplos de prendas que corresponden a esta capa son:

• Camisetas interiores.
• Pantalones de mallas.
• Guantes térmicos.
• Medias o calcetines.

SEGUNDA CAPA: AISLANTE TÉRMICO

La función de la segunda capa es actuar como un aislante térmico. Estas prendas no nos calientan directamente, sino retienen el calor que genera nuestro cuerpo y evitan su enfriamiento, mientras que favorecen la evacuación del sudor. Estas prendas están hechas de materiales que aun estando mojados puedan mantener sus propiedades aislantes y transpirables. Existen fibras sintéticas (polar, poliéster etc) y naturales (lana).

Algunos ejemplos de prendas que corresponden a esta capa son:

• Forros polares.
• Pantalones de trekking.
• Gorros.
• Guantes polares, manoplas y mitones.

TERCERA CAPA: PROTECCIÓN

La tercera capa es considerada la más “tecnológica” porque cumple tres funciones: es impermeable, cortaviento y transpirable. Esta capa debe ser lo más transpirable posible, pues las capas anteriores no han debido retener el sudor. Además, debe ser resistente a rozaduras, abrasión y desgarros, dado que estará en contacto con el entorno. Aquí es muy conocida la tecnología Gore-tex que consiste en una cubierta de membranas transpirables e impermeables.

Algunos ejemplos de prendas  que corresponden a esta capa son:

• Prendas con membrana impermeable (CHOMPAS, pantalones, guantes)
• Rompevientos.
• Softshells*: Esta prenda es considerada como una capa 2.5. Al no contar con una membrana tipo Gore-tex, son más cómodos y transpirables. Además, funcionan como cortavientos, tienen propiedades térmicas y presentan una buena resistencia a la abrasión. Sin embargo, no son tan resistentes al agua.

Esta teoría de las tres capas aplica tanto para la parte superior del cuerpo, como para las piernas. Esto no implica necesariamente que tendremos que usar tres pantalones, pues existen prendas que cumplen el rol de dos capas. Por ejemplo, si vas a escalar una montaña puedes usar un pantalón térmico como primera cama y combinarlo con un pantalón que tenga interior polar pero que el exterior sea impermeable, porque habrá nieve en tu destino.

Por último, recuerda que la idea del sistema de capas es comprender las funciones de los tres tipos de prenda y saber cómo combinarlas según las condiciones climáticas y las actividades que realicemos. En el siguiente cuadro puedes ver cómo ponemos en práctica lo aprendido en diferentes circunstancias:

Ahora que sabes cómo funciona la teoría de las tres capas, puede crear la combinación ideal para ti y tu siguiente aventura.